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Cómo desviar llamadas y bloquear números en Android
El SO de Google ofrece herramientas a los usuarios para hacer muchas más cosas que simplemente desviar o bloquear llamadas.
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Tu móvil puede estar renqueando y la culpa no siempre es de la obsolescencia programada, sino de no saber cómo limpiarlo para mejorar su rendimiento, aun cuando esto es algo muy fácil y que puedes hacer totalmente gratis. Sigue leyendo para darle a tu iOS o Android una segunda ¡vidorra!
Y es que lo sabemos, es normal, en cuanto tu smartphone empieza a dar señales de desgaste, rápidamente piensas en el susto de tener que rascarte el bolsillo para comprar un móvil nuevo. La buena noticia es que no siempre el rendimiento de tu móvil disminuye por la edad.
Aunque en el pasado algunas grandes empresas ya han sido multadas por acortar conscientemente la vida de su terminales, en muchas ocasiones el ocaso de los móviles se debe al mal cuidado de sus propietarios. Si, bueno, por tu culpa, por tu culpa, por tu gran culpa, pero, ¡eh, que tiene arreglo!
Imagínate fregar el suelo de tu casa con una fregona que ha recorrido los rincones más mugrosos de tu ciudad. ¿A que sería peor el remedio que la enfermedad?
Sigue la misma lógica y no instales aplicaciones para limpiar basura de tu móvil. La mayoría ofrecen hacerlo gratis pero, en realidad, te llenarán el móvil de publi, recogerán información de tu smartphone y, en el peor de los casos, hasta podrían infectarte el teléfono con un virus.
Por nuestra parte, te enseñaremos cómo limpiar tu móvil a fondo para mejorar su rendimiento mediante procesos totalmente gratis. Eso sí, ten en cuenta que una buena limpieza contempla algunos básicos de seguridad, ya que al eliminar la basura de tu móvil, si vas a lo loco, podrías experimentar algunas consecuencias distintas las esperadas.
Lo primero que tienes que hacer antes de empezar a limpiar tu móvil para mejorar su rendimiento es crear una copia de seguridad de elementos importantes como fotos, contactos, mensajes y archivos descargados que sean importantes y sepas que los puedes volver a necesitar o que los quieres conservar.
¿Lo tienes? ¡Pues al lío!
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Tal vez hayas oído hablar del Síndrome de Diógenes, que no es otra cosa que el hábito de acumular objetos de manera obsesiva y desmedida. Este trastorno tiene su reflejo en el mundo virtual y ya se empieza a hablar de Diógenes Digital.
Un caso típico es cuando descargamos apps que necesitamos en un momento puntual, y tras utilizarlas no las eliminamos del móvil. Poco a poco, las pantallas de inicio se van llenando de iconos que recuerdan a ciertos momentos, pero que no reflejan el uso real que le damos al terminal. También guardamos fotos y vídeos que no volvemos a ver jamás.
Quitar las aplicaciones que no utilizas es un punto de partida estupendo para limpiar tu móvil y mejorar su rendimiento y, de paso, es completamente gratis y seguro. No tengas contemplaciones ni acumules porsiacasos ya que, si quitas algo que más tarde necesitas, siempre podrás volver a descargarlo, ¿de acuerdo?
Vale, pues te quedas con Facebook, Instagram, Twitter, TikTok, ¿y qué más? Dejando de lado las aplicaciones nativas de Android o iOS (alarma, teléfono, mensajes, calendario), lo más seguro es que no utilices a diario más de un 20% de todo lo que tienes descargado.
De acuerdo con un estudio de App Annie, en 2018 había instaladas 80 aplicaciones de media en cada dispositivo móvil de todo el mundo, y de ellas solo se utilizaban unas 10 al día. Las demás, seguían “comiendo RAM”, descargando la batería y ocupando espacio en el almacenamiento.
Para revertir esta situación no existe ninguna receta mágica. Solo debes ser consciente de que estás entre las víctimas del acopio sinsentido, y después tratar de solucionarlo: lista lo descargado, analiza su uso real y elimina.
Ten en cuenta que aunque haya muchas apps que no utilices desalojadas en la nube, estas siguen ocupando cierto espacio en la memoria del teléfono.
¡Qué sería de los grupos de Whatsapp sin los memes, pantallazos y stickers que tus amigos y tú os enviais a diestro y siniestro?
Eso sí: el segundito que os dura la risa no se compara para nada con la eternidad que duran esos archivos tontos en el carrete de tu móvil ocupando espacio y entorpeciendo su rendimiento. Te prometo que no echarás de menos las fotos del ramen que se comió tu prima en vacaciones, la portada de la prensa rosa con un chisme sobre el famoso de turno, el pantallazo del "¿Qué se ha creído Pepito?" con la conversación previa al ghosting definitivo y menos, ¡muchísimo menos!, esa imagen de un osito con corazones que te ha mandado tu tía Eugenia para desearte buenos días.
Lo siento, tía Eugenia, pero los 365 ositos con corazones que has enviado a diario para desear buenos días, tienen que pasar a mejor vida.
(A Pepito le llegará el karma, no te preocupes y borra, borra, borra... ya no solo los pantallazos del chat con los que le ponías verde, borra todo: el botón de "vaciar conversación" es tu amigadatecuenta).
Whatsapp es la aplicación que probablemente más uses en el día, y también la que más basura acumule. Ponerla a trabajar a tu favor requiere litros y litros de sangre fría. Lo de la tita Eugenia y Pepito te va a parecer un paseo en bicicleta comparado con la fuerza mental que realmente hay que tener para limpiar a fondo Whatsapp y contribuir, con ello, a limpiar y mejorar el rendimiento de tu móvil.
Por un lado, eliminar la galería. Sí, tienes muchas imágenes a las que tienes aprecio, pero el 90% será contenido sin sentido, memes y fotos contextuales sin ningún valor. En cualquier caso, revisa el carrete por si acaso antes de borrar nada.
Seguro de que no hay nada interesante, elimina por completo la carpeta de la galería en la que se almacenan esas imágenes. Normalmente viene identificada con “WhatsApp”. Con eso también acabarás con los pesados -también en megas- vídeos.
Tras eso, para asegurarte de que la carpeta no se vuelve a llenar de basura, entra en “Datos y almacenamiento” del apartado de ajustes de la app, y después selecciona “Ningún archivo” en descargar con datos móviles, Wi-Fi e itinerancia.
¿Ya has limpiado las imágenes? El siguiente paso es hacer lo mismo con los chats. Busca solo aquellas conversaciones en las que sepas que tienes mucho historial (imágenes, vídeos, audios, muchos participantes). Abre el chat, pulsa sobre su nombre, y después haz scroll hasta abajo.
Entre los ajustes verás una opción para “vaciar el chat”. Con eso eliminarás todos los mensajes de la app, salvo aquellos que estén marcados como favoritos. Notarás la mejoría en el rendimiento de manera instantánea.
Las empresas intentan ser cercanas y ágiles a la hora de atender a sus clientes y, por eso, muchas están añadiendo números de Whatsapp para chatear con los usuarios. Bien, todos esos chats que pululan en tu lista de Whatsapp ya no tienen sentido.
Piénsalo: pediste 11 presupuestos de encimeras de granito para tu nueva cocina, hablaste con 4 agencias de viaje para tus vacaciones de hace un par de años y hubo un tiempo, súper lejano, en el que una pequeña boutique que conociste por Instagram te envió su maravilloso catálogo de abrigos para el otoño. Vale, pues esos chats siguen ahí y muy posiblemente estén embutidos de archivos multimedia que entorpecen el rendimiento de tu móvil.
Si te acostumbras a consultar con empresas y borrar todo justo al terminar la gestión, no volverás a pasar por esto. ¡A por ello!
La memoria RAM es uno de los componentes que más sufren por el uso diario del teléfono. Esto no sería muy preocupante, sino fuera porque de ella depende en gran medida el rendimiento y la fluidez del Sistema Operativo.
Actualmente tanto Android como iOS cuentan con configuraciones automáticas que mantienen a raya la saturación de este almacenamiento, pero aún así existen determinadas soluciones que puedes aplicar para sanarlo.
Es habitual, especialmente en usuarios más mayores y con poca experiencia digital, que los móviles estén saturados hasta límites insospechados de apps en segundo plano. En esa disposición consumirán menos, pero seguirán lastrando ligeramente el rendimiento.
Para llegar hasta ellas basta con realizar el gesto con el dedo indicado por el fabricante. En algunos terminales iOS pasa por hacer doble pulso en el botón home, para ver todo lo que hay en segundo plano.
En versiones posteriores ese atajo se sustituyó por un movimiento ascendente sobre la propia pantalla. En modelos Android sucede lo mismo; casi siempre llegarás a ellas desde la pantalla de inicio o desde un botón central.
También podrás cerrar las aplicaciones siguiendo un método algo más agresivo: forzando su detención. Eso sí, en ese caso tendrás que navegar por los Ajustes, identificar la app que quieres detener de la lista, hacer clic sobre ella y seleccionar el botón específico.
Tal y como sucede en el ordenador, el móvil también cuenta con una serie de aplicaciones que se inician automáticamente al arrancar el Sistema Operativo. Y claro en el proceso ralentizan el arranque de según qué funciones, y lastran el rendimiento general.
Si cuentas con un terminal iOS no tendrás más remedio que resignarte, pero si tienes un móvil Android, hay camino para aliviar la carga del SO al comenzar a funcionar. Recuerda que depende del modelo y el fabricante.
De forma general, entra en Ajustes y busca la configuración “Inicio automático”. ¿No encuentras el apartado en el que se encuentra? Tienes la posibilidad de llegar hasta ella escribiendo simplemente el nombre en el buscador general. Entra y desactívala.
Si tu móvil no está "aturullado" de apps que no utilizas y elementos multimedia que no volverás a ver en la vida, entonces puede que su bajo rendimiento se deba a contenido basura que no se nota a simple vista. Te diremos cómo limpiar tu móvil de este contenido que juega al cucutrás y disminuye su funcionamiento sin que te des cuenta.
En algunas ocasiones ni desinstalando apps conseguirás eliminar por completo su rastro y mejorar el rendimiento de tu teléfono. Para eso accede a “Ajustes", después “Almacenamiento” y por último busca la opción “Datos en caché”. Acepta el aviso y borra esta información.
Algo que tienes que tener en cuenta es que, la mayor parte del tiempo, tendemos a relacionar la caché con el navegador de Internet y las páginas web, pero el smartphone también acumula información de utilidad, que se puede convertir en molesta si no damos uso a según que aplicaciones.
No toda la caché es negativa, e incluso en la mayoría de situaciones ayudará a ejecutar las aplicaciones de forma más rápida. Pero hay elementos de apps como Facebook o Google Chrome que pueden estar ocupando más de la cuenta y empeorando el rendimiento de tu smartphone.
Paciencia y buena letra. Además de la galería de Whatsapp que, llegados a este punto, ya habrás borrado como parte del ritual para limpiar tu móvil y mejorar su rendimiento, hay otras carpetas de tu móvil en las que se alojan imágenes que lo atiborran.
Entra en la aplicación de Fotos del móvil, y repasa una a una las imágenes de la galería para ir eliminando aquellas que ya no necesites. Copias, capturas de pantalla, memes, recordatorios; todo.
Haz lo mismo con los vídeos buscándolos directamente en la carpeta general, o acudiendo a su sitio específico dentro de la app. Cuando hayas acabado, asegúrate de que todo lo eliminado no ha ido a parar a una papelera.
Esto es muy común en iOS y frecuente en Android. Lo eliminado recientemente se acumula en una carpeta concreta, en caso de que quieras recuperar algo. Búscala y vuelve a repetir la operación para asegurar su borrado.
Tip: Hay contenido descargado que no necesariamente es multimedia. Por ejemplo: PDFs de documentos que has tenido que firmar online, esa revista con planes gratis para el finde, el ebook del Príncipe Harry que te lo envió cuatro veces tu madre... Con todos estos archivos también tendrás que hacer una selección que libere espacio en tu móvil y pueda mejorar su rendimiento.
Ya sea porque no los necesitas en absoluto -imagínate algo más inútil que una agenda cultural con planes que ya pasaron- o porque los tienes repetidos en varias descargas idénticas, pon la lupa en estos archivos y verás cómo borrarlos te cambia la vida.
Si nada de lo anterior funciona, y sigues teniendo la memoria hasta los topes de archivos que no sabes dónde están y que echan por tierra el rendimiento de tu móvil, queda una solución final. Es la más agresiva de todas, y antes de acudir a ella recomendamos hacer una copia de seguridad.
Hablamos de la configuración de fábrica; una opción con la que el móvil volverá a su estado original, eliminando en el proceso toda la información personal y las aplicaciones descargadas. ¿Estás completamente seguro?
Es un proceso que tardará varios minutos y que se aconseja hacer con el terminal conectado a la corriente. Al terminar tendrás tu smartphone completamente nuevo.
Te dijimos que no y ahora te decimos que sí, ¡cómo cambian las cosas! Vale, la cuestión es que no te puedes descargar cualquier app que te prometa limpiar tu móvil y mejorar su rendimiento como por arte de magia, porque ahí es cuando se masca la tragedia y te cuelan el virus de tu vida. Pero, si eliges bien y con cabeza, una opción fiable y gratificante es pedir la ayuda de apps como Files de Google; una app desarrollada por el propio gigante tecnológico, que permite gestionar los archivos y hacer limpiezas profundas de Android.
Es completamente gratuita y ya la han descargado más de 4 millones de personas desde su lanzamiento. Como plus, cuenta también con la interfaz de Android y con la integración habitual de todos los softwares de la familia.
¿Quieres otra alternativa? Tanto la Play Store como la App Store cuentan con decenas de aplicaciones similares que te permitirán limpiar el móvil sin gastar ni un solo euro de más:
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