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Comprar un móvil de segunda mano puede suponer un ahorro importante, aunque es importante escuchar consejos para saber qué compramos, a quién y en qué estado. Hay varias formas de comprar móviles usados, ya que en los últimos años se ha puesto de moda la opción de los dispositivos reacondicionados, que en el fondo vienen a ser móviles de segunda mano puestos a punto para darlo todo en su nueva vida.
En general, comprar un móvil usado es una transacción segura si se hace con atención a los detalles. Es común que sean empresas las que nos proporcionan estos terminales, que han sido revisados antes de llegar a nuestras manos y además, cuentan con garantía de un año, por lo que ofrecen cierta tranquilidad.
No obstante, y como ha ocurrido siempre, la mayoría de las compras de móviles de segunda mano se realiza entre particulares, y es ahí donde tenemos que tener en cuenta varias aspectos para evitar sorpresas y que la ilusión de lograr un ahorro se reemplace con un disgusto.
Y es que comprar un móvil de segunda mano puede ser una grata experiencia o una auténtica pesadilla. Por ese motivo y antes de lanzarte a la aventura, echa un vistazo a nuestros consejos para que puedas realizar tu compra con más tranquilidad. No pases por alto ninguno de estos puntos y no dudes en preguntar al vendedor ante la más mínima duda.
Antes de meternos en materia, queremos matizar que comprar móviles de segunda mano y comprar un móvil reacondicionado no es exactamente lo mismo.
Pese a que en ambos casos notarás un gran ahorro, cada uno de estos segmentos tiene unas características específicas cuyo punto de encuentro nos interesa en cualquier caso. Ambos son terminales útiles que nos pueden durar muchos años, aunque no seamos sus primeros dueños y, justamente por esa sutileza, nos pueden salir tirados de precio.
Como norma general, este tipo de teléfono usado ha sido de alguien y es, precisamente, ese antiguo dueño quien lo pone en venta a través del boca a boca o de plataformas como Wallapop. Parten de la idea de que funcionan perfectamente, pero su antiguo dueño lo quiere cambiar, por ejemplo, por un modelo más moderno o de gama superior.
En este caso, la buena fe y el cuidado que hayan tenido con el dispositivo serán la clave para que recibas un móvil en condiciones. Ten en cuenta que no hay mediación de una empresa que los revise y los ponga a punto antes de venderlos.
A diferencia del smartphone de segunda mano, el smartphone reacondicionado suele venir de una empresa especializada en someter el terminal a un mantenimiento profesional que le permita estar al cien por cien cuando llegue a su nuevo dueño.
Además de la revisión física en busca de daños o desperfectos evidentes, los móviles reacondicionados podrían tener algún daño físico de poca envergadura, como un rayajo o algún desconchón que no afecte a su funcionamiento. También pueden incorporar alguna pieza cambiada como la pantalla o la batería, eso sí, siempre por recambios originales, homologados y en perfecto estado.
Un punto a favor es que incluyen un año de garantía y que, aunque sean más caros que uno comprado directamente a su antiguo dueño, seguirán suponiendo un ahorro importante comparado con comprarlo a estrenar.
Dentro del mundo de los móviles de segunda mano y a caballo con el placer de estrenar, nos encontramos con los teléfonos desprecintados, que merecen un hueco especial: terminales que han sido regalos de empresa, de operadores o utilizados para eventos y reseñas de prensa y son, por lo tanto, terminales "kilómetro cero", prácticamente a estrenar, salvo por el hecho de que alguien les ha "quitado el plastiquito" antes.
Estos móviles pueden llegar a costar incluso la mitad de lo que cuesta un smartphone completamente nuevo y te durarán lo mismo que si los hubieras sacado tú de la tienda.
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El gran error al comprar un móvil de segunda mano es fiarse de las fotos o la descripción sin pedir información adicional. La mayoría de estas compras se realizan online y ni siquiera vamos a estar en contacto directo con el vendedor, por lo que debemos extremar las precauciones y revisar mejor que nunca el contenido.
Una de las mayores ventajas de los smartphones usados es que puedes conseguir entre 25% y 50% de ahorro frente a adquirirlos nuevos de paquete. Además, son muchas las ocasiones en las que podrás contraofertar al vendedor para que el precio de salida baje y tu compra sea mucho más suculenta.
Sin embargo, "nadie da duros a pesetas", así que has de prestar atención a precios excesivamente bajos porque pueden tener algún disgusto oculto que acabe por convertir una transacción agradable en una pesadilla.
Asegúrate de que el teléfono está en buen estado y tiene todas sus piezas intactas. Busca arañazos o grietas en la pantalla y comprueba todos los botones y funciones. Revisa que el estado físico del terminal es igual que el que describe el vendedor en el anuncio y que el ahorro que ofrece es real, considerando el estado del smartphone que estás a punto de comprar.
Puede que te encuentres con teléfonos que están peor de lo que esperabas o de lo que su anuncio prometía. Lejos de ser un problema, esto podría ser una oportunidad de conseguir una rebaja en el precio.
Si quedáis en persona, estudia el dispositivo en detalle. De lo contrario, pide más fotos al vendedor en caso de que no haya suficientes o quieras ver una zona en concreto que no aparece en el anuncio.
Hagas lo que hagas, intenta fijarte en posibles averías ocultas. Prueba el terminal a consciencia antes de soltar el dinero y, ante la duda por cualquier función que no vaya como debería, si es algo crítico, mejor déjalo pasar y compra otro.
Averigua dónde compró el móvil y cuánto tiempo hace que lo tiene. Pregúntale si ha tenido algún problema con él y si lo ha reparado o ha cambiado alguna pieza. También es importante preguntar sobre el estado de la batería y la duración de la misma. Si vamos a comprar un iPhone, pide al vendedor que te muestre el porcentaje de salud de la batería. No te quedes con ninguna duda y sospecha de evasivas o respuestas vagas a tus preguntas.
Aunque el teléfono esté en buen estado, puede haber daños ocultos que haya que reparar. Podemos preguntar al vendedor si está dispuesto a reparar cualquier daño que se encuentre después de comprar el teléfono. Si no está dispuesto a reparar esos posibles daños ocultos, puede que no sea la mejor opción…
Digamos que, por ejemplo, el teléfono te encanta y estarías dispuesto a pagar una reparación. Entonces, antes de comprarlo, infórmate sobre el posible coste de esa puesta a punto. Recuerda que lo más importante es conseguir un ahorro frente a haberlo comprado nuevo y que, muchas veces, lo barato sale caro.
Cuando elijas el modelo que quieres comprar, investiga un poco cómo de fácil es encontrar recambios, por ejemplo, para la batería. Esto te ayudará a estimar cómo de fuerte podrá ser tu batalla contra la obsolescencia programada.
Como hemos comentado anteriormente, si la compra se realiza a una empresa especializada, tenemos la cobertura de la garantía estipulada en la ley. Entre particulares, esta garantía tiene la validez de dos años o la estipulada por el fabricante. Por ese motivo es importante saber si el vendedor tiene factura y si el terminal tiene garantía en vigor.
Algunos vendedores pueden ofrecer una garantía limitada o una política de devolución de teléfonos usados, pero es importante tener claros los términos y condiciones antes de realizar la compra.
Incluso dentro del mercado de la segunda mano hay opciones de ahorro. Una de las mejores formas de saber si estás haciendo un buen trato es comparar precios. Aunque puede ser tentador comprar el primer teléfono que veas, tómate tu tiempo para comparar precios en diferentes tiendas y sitios web.
Puedes visitar tiendas de segunda mano o sitios web que venden teléfonos usados y buscar el modelo específico que quieres y después comparar los precios para ver cuál te supone un ahorro mayor. Plataformas como eBay también ofrecen una perspectiva real de hasta cuánto están dispuestos a pagar los usuarios por un modelo concreto de móvil usado.
Punto peliagudo donde los haya: muchas veces, queremos un móvil del año porque nos encanta su diseño o alguna funcionalidad que se haya incorporado por primera vez en el modelo en cuestión.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que, en ocasiones, en el mercado de móviles de segunda mano podrás encontrar móviles de gama alta de hace un par de años, cuyas funcionalidades sean incluso superiores a ese gama media último modelo que te ha robado el corazón.
Circunstancia esta que te llevará a un modelo de ahorro diferente al que inicialmente tenías en mente, al pasar de un gama media del año, considerado más económico por ser de gama media; a un gama alta un poco más antiguo, considerado la mejor opción de ahorro al darte más y mejores prestaciones por el mismo dinero.
Ojo, cuidao, porque muchas veces, aunque el hardware de un móvil funcione de maravilla, el problema te lo puedes encontrar en el software.
Cada vez que un móvil requiere la actualización del sistema operativo, se trata de mucho más que de tener la versión más reciente: hay mejoras de seguridad, más compatibilidad con apps nuevas y otras muchas variables a considerar para entender que no todo vale en cuanto a sistemas operativos y que uno muy antiguo, en lugar de ser un ahorro, te puede salir muy caro.
Cada vez son menos las operadoras que restringen los móviles comprados a través de su financiación. No obstante, puede que tu flamante teléfono "nuevo" de segunda mano venga de otro país. Bajo ese supuesto, te puedes encontrar con que tu smartphone no es compatible con las bandas de tu operadora o de tu país, ¡y eso sí que es una faena!
Otro punto a observar con atención es la reputación del vendedor. En las plataformas online es común que exista un registro de los usuarios que venden artículos y una puntuación otorgada por sus compradores anteriores.
Intenta, siempre que sea posible, decantarte por vendedores que tengan una buena calificación derivada de sus transacciones anteriores.
PayPal, los sistemas de pago de las plataformas de venta online, o una transferencia bancaria que puedas anular con ayuda de tu banco, suelen ser los mecanismos más fiables para comprar un smartphone de segunda mano.
Especialmente si no vas a ver al vendedor y al dispositivo en persona, procura que los pagos se hagan a través de estos soportes y evita los sistemas como Bizum o cualquier otro que pueda suponer un escollo a la hora de reclamar si lo que recibes no se corresponde con aquello por lo que has pagado.
Será algo común que te encuentres con vendedores -casi siempre parecerán experimentados- que te ofrezcan un cierto ahorro en comisiones o impuestos si pagas de forma "opaca" ante la plataforma que alberga la compra o, incluso, ante Hacienda. Desconfía de estos ofrecimientos, por tentadores que sean, y utiliza plataformas de pago seguras.
Desde Llamaya, esperamos haberte ayudado una vez más. Como verás, hay varios aspectos importantes a tener en cuenta antes de comprar un móvil de segunda mano. Lo más importante es comprobar todos los aspectos más importantes como el funcionamiento o la posible garantía. Te deseamos suerte en tus compras
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