Qué pasa si tu móvil deja de recibir actualizaciones

Nuestro smartphone está conectado a la red de manera continua. Es algo normal si queremos aprovechar muchas de sus funciones. De hecho, un móvil funciona gracias a una delicada combinación de hardware y software que va mejorando con cada generación. Además, un móvil recibe varias actualizaciones durante su vida útil, pero, ¿qué pasa cuando deja de recibirlas?

Los fabricantes lanzan continuas actualizaciones y no todas sirven para lo mismo. Forma parte del soporte y mantenimiento que las marcas hacen de sus dispositivos. De hecho, un smartphone puede mejorar mucho durante su vida útil a medida que el fabricante lanza actualizaciones. Puede recibir mejoras de software, añadirse nuevas funciones o incluso corregirse

Pero no todo dura para siempre y llega un momento en el que un móvil deja de recibir actualizaciones. ¿Qué pasa en ese momento? ¿Hay que cambiar de móvil? ¿El terminal deja de estar protegido? Vamos a resolver todas estas dudas y dejarte claro que es lo que ocurre cuando tu móvil deja de recibir actualizaciones.

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Las actualizaciones son importantes pero limitadas

Un smartphone puede recibir más o menos actualizaciones dependiendo de muchos factores. El primer es la implicación de la marca es ofrecer un soporte de calidad y acompañar a sus clientes en su servicio postventa. No todas las marcas ofrecen la misma frecuencia de actualizaciones ni durante el mismo tiempo.

Hay que tener en cuenta que esto requiere de un equipo dedicado al desarrollo, control y mejora del dispositivo. Y no puede ser eterno. Al cabo de unos años ese equipo va dando paso a otros terminales y tu smartphone, por muy bien que vaya, dejará de recibir actualizaciones. Ha tocado techo en su margen de mejora y los errores han sido (o no corregidos) pero lo cierto es que el aviso para actualizar a una nueva versión dejará de llegar.

¿Qué ocurre entonces?

Por desgracia, el fin de las actualizaciones significa el adiós a nuevas versiones de firmware. Eso significa que no tendrás las nuevas versiones de los sistemas operativos con los añadidos, mejoras y nuevas funciones que ello suele suponer. También es posible que el móvil no reciba más optimizaciones de rendimiento en apartados como la batería, el rendimiento o la conectividad.

En última instancia, es posible que el fabricante finalice el soporte totalmente y eso incluye no recibir incluso parches de seguridad. Eso significa que el móvil podría estar más fácilmente expuesto a amenazas que pudieran aprovechar sus vulnerabilidades al no estar tan protegido. Cuando esto ocurre, puede que sea el momento en ir pensando en cambiar de smartphone.

Además, con el tiempo, algunas aplicaciones pueden dejar de ser compatibles con versiones más antiguas del sistema operativo. Esto significa que es posible que no puedas instalar o actualizar ciertas aplicaciones, lo que limita la funcionalidad de tu teléfono.

En la siguiente tabla puedes hacerte una idea del soporte que ofrece cada marca a sus dispositivos. Hay que tener en cuenta que puede variar de un modelo a otro dentro del mismo fabricante

Desde LlamaYa esperamos haberte ayudado a resolver tus dudas. Como verás, las actualizaciones de un smartphone son la piedra angular de su buen funcionamiento y el añadido de mejoras. Pero con el tiempo todo se acaba e incluso puede suponer un riesgo de seguridad debido a ciberataques.

Y tú, ¿sigues recibiendo actualizaciones en tu móvil?